Opinión | ¿Por qué tenemos un período de tarifas de energía altas en Colombia?: Camilo Marulanda, gerente de Isagen

Por: Camilo Marulanda López, gerente de Isagen*

Hace exactamente un año el país ya estaba inmerso en el debate por los altos costos de las tarifas de energía en Colombia, atribuidos en ese momento al indexador utilizado (Índice de Precios al Productor, IPP), en algunos contratos de venta de energía.

Sin embargo, desde ese entonces alertábamos que ese no era el único motivo y debían analizarse otras causas, como la inclusión en las facturas de los usuarios de las pérdidas, particularmente altas en la costa atlántica; las distorsiones derivadas de la aplicación de la opción tarifaria; y el momento de estrechez entre oferta y demanda que estábamos viviendo, por el retraso de proyectos críticos de transmisión y generación de energía.

Señalamos en ese momento que tomar decisiones en materia de estructura de mercado con base en la coyuntura no era una buena aproximación para resolver los problemas, y hoy que el IPP escasamente llega al 0,6 % acumulado en el año, el tiempo parece darnos la razón.

Precisamente, pensando en soluciones temporales que no afectaran las señales del mercado, Isagen fue la primera empresa en firmar el Pacto por la Justica Tarifaría, liderado por la exministra Vélez, decisión que se sumó a los descuentos que ofrecimos desde 2021 a varios de nuestros clientes, especialmente en la costa atlántica, un congelamiento del precio en el 2022 y un techo máximo que acordamos para el 2023, que ha servido para mitigar estas alzas.

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Reiteramos entonces la invitación a no tomar decisiones de fondo en política pública basadas en el corto plazo. La principal razón de la subida de tarifas en los últimos meses no es la especulación de las empresas generadoras, pues no especulamos para obtener ganancias extraordinarias atípicas en la Bolsa de energía.

Para entender estas alzas, debemos tener en cuenta que, ante la estrechez de la oferta, presionada aún más por las menores lluvias por el fenómeno El Niño, se incrementa la generación térmica para cuidar el agua de los embalses

Como bien lo ha argumentado la Asociación Colombiana de Generadores de Energía (Acolgen): “El debate de las tarifas es loable, hay que darlo y hay que trabajar en pro de disminuirlas, pero sin descuidar otro objetivo igual de importante: contar con energía en todos los momentos, que es lo que llamamos confiabilidad y es un activo que no podemos perder”.

Además, luego de un juicioso análisis, el gremio ha observado que ninguno de los segmentos en Colombia de consumo de electricidad residencial bajo, medio o alto, o comercial/industrial, tiene las tarifas más altas, ni del mundo ni de la región, sin dejar de destacar que los países de tarifas más bajas no necesariamente tienen el servicio más confiable.

Por ejemplo, en Colombia las tarifas se ubican muy por debajo de los precios en Uruguay, que es el país con las tarifas más altas en la región, y levemente por encima de países como México, Brasil, Argentina y Ecuador, que han sufrido apagones y racionamientos de forma constante en las últimas dos décadas.

Venezuela, que tiene la tarifa más baja y estatizó su sistema eléctrico en 1993, tuvo en 2021 más de 190.000 interrupciones del servicio y en 2022, 76 % de los usuarios reportaron daños en equipos eléctricos, debido a los racionamientos, según datos de Acolgen.

Utilizando una perspectiva comparada el precio promedio de la electricidad para los hogares en marzo de este año (antes de que iniciará la volatilidad en la Bolsa de energía en Colombia por el anuncio del Fenómeno El Niño) fue de US$0,18 por kilovatio en Colombia mientras que, en Italia, el más costoso del mundo, fue de US$0,57.

Por ello es importante atender la coyuntura, pero sin dejar de reconocer que los precios de la energía en Colombia son competitivos, se ha construido un sector eficiente en precios sin renunciar a la confiabilidad frente a otros referentes en América Latina, y lo más importante, sin apagones desde los años 90.

Reiteramos nuestra invitación a construir soluciones que beneficien a los usuarios con tarifas competitivas, asegurando la expansión eléctrica que necesita el país.

*Gerente general Isagen