Historia del aguardiente en Colombia y su éxito actual.
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Restricciones a venta de Aguardiente Amarillo en Bogotá y Cundinamarca: revelan nuevas causas

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Desde inicios de julio la Industria Licorera de Caldas y la de Cundinamarca tuvieron un percance con la venta del reconocido Aguardiente Amarillo de Manzanares.

Este percance se reflejó en la prohibición de venta en Bogotá y otras ciudades de Cundinamarca, afectando a bares, discotecas y licoreras.

La pugna de la distribución del Aguardiente Amarillo viene de la Industria Licorera de Caldas (ILC) y Cundinamarca por permisos que se obtuvieron en 2017 y no fueron actualizados correctamente en junio de este año.

Así lo explicó la empresa de Caldas en un comunicado, si otras licoreras desean vender sus productos en departamentos requieren un permiso por parte de los gobernadores. Este es válido por 10 años y se puede prorrogar.

“Estos permisos no podrán ser discriminatorios ni podrán generar barreras de acceso ni restricciones arbitrarias al libre comercio ni al principio de libre competencia, de acuerdo con la Ley de Licores (1816 de 2016), es decir, se aplicarán de manera general para todas las empresas que pretendan ingresar aguardientes a distintos territorios”.

Venta de licores en Cundinamarca.
Venta de licores en Cundinamarca. Imagen: archivo Valora Analitik.

Cundinamarca obtuvo en 2017 este aval para distribuir productos de la ILC, y en 2019 incluyó el Amarillo.

Pero, la Dirección de Rentas y Gestión Tributaria adscrita a la Secretaría de Hacienda de Cundinamarca expidió el 6 de junio de 2023 la Resolución 797, por la cual revocó la autorización de la adición del producto Aguardiente Amarillo para su ingreso al departamento.

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Es decir, legalmente el departamento y Bogotá no tienen permiso de gozar del producto altamente demandado por su sabor y sus 24 grados de alcohol de la Licorera de Caldas en fiestas, reuniones y hogares.

¿Ya se solucionó el problema y Cundinamarca puede vender el Aguardiente Amarillo?

No, la Dirección de Rentas de Cundinamarca afirmó que la manera de haber evitado la revocatoria del permiso y haber evitado la imposibilidad de comercializar el aguardiente era tramitando “un proceso de actualización ante el Invima”.

La actualización se refiere a modificar la graduación del aguardiente de 32 a 24 grados.

El Aguardiente Amarillo de 32 grados cuenta con permiso de introducción vigente (porque no fue revocado) a través de la Resolución No. 0000842 de 26 de mayo de 2017, siendo lo único pendiente la modificación de grado alcoholimétrico.

Con base en ello, la ILC solicitó al Invima la modificación del Registro Sanitario L-0005 de la presentación de 32 grados de Aguardiente Amarillo, a cambio de graduación alcoholimétrica a 24.

El Invima el 31 de julio autorizó la modificación a 24 grados de alcohol del Registro Sanitario L-0005 de Aguardiente Amarillo de Manzanares.

El Estatuto de Rentas de Cundinamarca estipula que este tipo de cambios solamente deben ser informados a la Administración Tributaria Departamental con el fin de actualizar los permisos de introducción.

Sin embargo, la Dirección de Rentas y Gestión Tributaria decidió no actualizar la modificación autorizada por el Invima, por lo que no se podrá adquirir en licoreras, gastrobares, discotecas ni bares.

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