Proparco financia renovación de flota de buses en Cartagena y Bogotá
En 2018 Proparco, filial del Grupo Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), inauguró oficina en Bogotá. Entró a operar en Latinoamérica en 2007. Desde entonces, los equipos de Proparco en Colombia, Brasil y México completaron más de US$3,9 billones de inversión en la región.
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Las actividades financiadas en los últimos 3 años en Latinoamérica disminuyeron en 1.608.736 toneladas de CO2 anuales. Eso equivale a la absorción de una arboleda tropical de 1.577 hectáreas. Es decir, aproximadamente un área de 1.600 estadios de fútbol.
Desarrollo sostenible en Latinoamérica
La organización impulsó con US$50 millones en Ecuador, en 2019, la disminución de su huella de carbono. Esto mediante la primera emisión de bonos verdes en el país realizada por Banco Pichincha.
La emisión sirvió para financiar nuevos proyectos en áreas de energía renovable, eficiente y en el manejo sostenible del recurso hídrico.
En Perú fortaleció con US$30 millones Acceso Crediticio. Esta financiera peruana no bancaria se especializa en la financiación de automóviles y vehículos de transporte público.
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Desarrolló una oferta de préstamos a microempresas y pymes activas en el sector del transporte urbano en las ciudades de Lima y Callao. Se crearon más de 2.000 puestos de trabajo indirectos y más de 650 directos.
La primera apuesta de Proparco en Colombia fue la financiación, con 24 millones de euros, de 222 de los 658 nuevos buses a gas para Transcaribe en Cartagena.
Así redujo en 60 % las emisiones de CO2 en la ciudad tras reemplazar 1.585 antiguos buses a diesel y la construcción de una carretera exclusiva para autobuses.
También en Colombia Proparco financia con un préstamo equivalente a US$52 millones, el reemplazo de una flota de buses diésel obsoleta y altamente emisiva del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP), por más de 250 buses eléctricos nuevos que permitirán a Bogotá mejorar su calidad del aire.
El propósito es impactar la salud de las poblaciones de las localidades de Fontibón y Usme. Con estos vehículos se completa la segunda flota eléctrica más grande de América Latina.
